miércoles, febrero 01, 2006

Onyo

Los nombres de algunas montañitas vascas tienen su misterio. El Onyo u Onddo, por ejemplo.
El último domingo, Patxi y yo subimos al Onyo (nosotros decimos así...). Caminamos sobre el enmoquetado de dos dedos de nieve que amortiguaba las pisadas en la tierra congelada. Luego subimos a la antecima del Adarra, por el este, y descendimos hasta Besabi por una pista.
Todo esto, que suena a dialecto mandarín para tantos, debería estar ilustrado con la foto del buzón que corona la cima del Onyo (redondeada como un hongo). Onyo = Hongo, fin del misterio de la primera línea. El buzón es una camita de aluminio. Como la cámara digital se resistía a trabajar con el frío, hoy he buscado en google y entre los muchos Onyos raros, casi todos japoneses, me quedo con ésta.
Ella era el único "Onyo" que comía.

4 comentarios:

  1. Anónimo4:51 p. m.

    No me puedo creer que esa cámara, que resistió el frío andino, se negara a trabajar por allí. ¿No la estarás malcriando? :P

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  2. Se me acabó la maldita pila...

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  3. Anónimo11:19 p. m.

    Al final, la cámara si era un artículo de primera necesidad ¿eh? Decímelo a mí, que saqué fotos de al lado del escenario con una cámara "Yamada" con los resultados previstos... Luego fijate.

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  4. Anónimo12:53 p. m.

    Me parece que el Onyo de foto es una cumbre más difícil de alcanzar que la del Hongo. Aunque me haría montañero sólo para intentarlo

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