lunes, abril 23, 2007

Sueños razonables

Iba a escribir filosóficos en el título, pero no me deja meter las tildes y me fastidia. Bien. Debo de soñar mucho mientras duermo, como todo el mundo, pero no lo recuerdo. Un cálculo aproximado de mis sueños recordados apenas alcanza cuatro casos anuales. Y de ésos, tres son pesadillas (en una bailo lambada con mi gran profesora de inglés embutida en algo brilloso y anaranjado) producto del chimichurri o del tercer plato en la cena; y el otro sería uno de esos sueños que califico como filosóficos.
Por ejemplo, el último. Sueño que me huele mal el sobaco y voy a comprar desodorante (sí, ya sé que primero hay que lavarse). Y en los estantes todos los botes de desodorante (espray, bola, crema, pomada...) tienen los nombres en español. Sin el inglés, las perfumerías pierden glamour. Y yo me digo: ¡ya sé para qué sirve el inglés! Para el desodorante y para humillar a los ignorantes con letras de canciones y películas que, se supone, deben conocer.
Entonces se acerca un estadounidense. Lo reconozco antes de que hable, por su sonrisa de estúpido satisfecho, porque hace un globito con el chicle, por su camiseta XXXL, por su gorrita con visera y por el pantalón corto. Viene caminando inocentemente con un barril de helado debajo del brazo. Me imagino su axila gélida, aromatizada con vainilla y chocolate.
El yanqui se queda atónito. Ya no es Oxygen, Deo-Cream, Sensitive, Unlimited, City Hunters, Fresh, Musk, Baby, Roll-On, Botanicals, For Men... ("tarduzcan" los que bailaron el inglés).
Ya no es.
Y le digo: "Je, Bahía de Cochinos al lado de esto, nada".
Él no comprende bien, me parece. Yo le miro a los ojos y le digo retador: "Lo peor es cuando en misa los músicos alternativos de la parroquia la emprenden con las versiones de Simón y Garfúnquel o los Bítels".
Y me voy, que se me hace tarde.

13 comentarios:

  1. Que no vea Peter que alimentas el blog con sueños, menudo recurso narrativo. Me hace gracia que el estadounidense venga con un barril de helado debajo del brazo, porque eso le pega más a las chicas americanas desafortunadas en el amor. Clichés de cine.

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  2. Para una vez que sueño y recuerdo... Como diría Míchel después de aquel gol con la selección nacional: ¡Me lo merezco!

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  3. "botes de desodorante", para los uruguayos que imaginan pequeñas barcas repletas de desodorantes, vale explicarles que son "tarros de desodorante" o "envases de desodorante".

    Cuanto menos estupefacientes se consume, menos extrañezas se sueña.

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  4. El chimichurri, el chimichurri...

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  5. Mucho, muchísimo mejor tu sueño que el mío. Axila gélida. Hmm.

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  6. J., para una vez que escribo un sueño filosófico, abro tu blog y encuentro otro. Coelho hablaría de una conexión mística y conspiradora entre nosotros para que seamos felices. ¡Zaca!

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  7. Se nota que la filosofía no es lo mio...no entendí nada.


    Salú!

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  8. dichosos los que soñamos con cosas sencillas como pantuflas, por ejemplo.

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  9. Publifreak, eres muy grande.

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  11. Si quieres acordarte más a menudo de tus sueños filosóficos/razonables el tío Beni te ofrece un consejo que te ayudará. La clave está en ser un poco vago y programar el despertador del móvil varias veces antes de levantarte de la cama. En esos breves periodos que transcurren entre alarma y alarma, permaneces en un estado de semiconsciencia, en el cual es más probable que recuerdes lo que en ese momento estabas soñando.
    Claro, que esto requiere muchos años de experiencia en vagancia matutina. Si llevas toda tu vida saltando de la cama como un muelle cada vez que suena la alarma... lo tienes claro: a sueño por año.

    Que conste que yo me despierto todos los días temprano para cumplir con mis obligaciones estudiantiles. Lo que aquí expongo lo practico, únicamente, los sábados, los domingos y en periodo de exámenes.

    Por cierto, eso de que no puedas poner tildes es positivo: agudiza tu ingenio en los títulos.

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  12. El glamour de los perfumes es en francés, y no falta el ^.
    A propósito de sueños: conozco a alguien que en su infancia soñaba con "Verugos" (por Verugo Carámbula). Serían pequeñas criaturas con pelo blanco y ojos que se ven a través del pelo (o algo así si no entendí mal). ¿No es un sueño gracioso?

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  13. Sí, Natilla, conocemos a la persona en cuestión (la de los "verugos").
    En realidad, me temo que era la personificación de esas pelusas enormes que crecen debajo de las camas cuando no se pasa la escoba en meses. Pero llamémoslas "verugos".

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