Los regresos de la montaña se hacen poco a poco, con descompresiones, como los buceadores de profundidad. Domingo 30 de mayo, seis y media de la tarde, parada de coche en la gasolinera de Liédena para estirar las piernas y comprar un helado. Además, el cerebro sale de la calma chicha peligrosamente: comprendo de golpe que necesito saber dos cosas.
Llego con el helado ante el cincuentón de la caja. Detrás de él, veo expuesto un diario y en la portada leo que la Real Sociedad ha ganado 2–1 al Villarreal B. (¡Bien!). Ya sólo queda una cosa…
-Uno con noventa y cinco.
-Oiga –pregunto al cajero-, ¿sabe cómo quedó el de Eurovisión?
-Como el quince o así.
P.D. “Recuerda quién y cuánto te quiere”. Portugal (12 puntos), Lituania (8 puntos), Armenia (7), Albania (7), Letonia (5), Eslovenia (5), Ucrania (4), Rusia (4), Finlandia (4), Moldavia (4), Rumanía (2), Bulgaria (2), Georgia (2), Bélgica (1) e Israel (1). Quitando Portugal, que quiso mucho a Diges, y a Bélgica, que le quiso “poquito”, ¡qué lejanos los votantes!
lunes, mayo 31, 2010
Achar (de Alano)
El Achar, a la derecha del collado de Tacheras, aún con la capucha nubosa (paraíso de la ch).
El domingo 30 de mayo subimos el Achar (descartamos sobre la marcha el Rincón de Alanos, porque se metió la nube y no se distinguía la cima). Ascendimos seis, número que provoca algunas desconfianzas con la repetición, pero que funciona de maravilla para un grupo montañero: Asun, Lourdes, Pilar, Susana, Ángel (no caído) y yo. Entre las nubes bajas, Achar de Alano (2.099) parecía más difícil visto desde abajo. Cuando llegamos al buzón de la cima, las nubes se habían retirado y disfrutamos de ese rato con el paisaje vertical sobre el valle de Zuriza.
Dice Josema que el pico de los Monjes es el que da más por menos. Y reconozco que, si se concede una importancia capital al desnivel y la altitud alcanzada, puede resultar así. Pero los Alanos, sobre todo en invierno y en primavera, además de un desnivel muy asequible ofrecen impresiones montañeras de primera.
Tan sólo bajando: el paso del peñasco calizo al valle colgado donde florecen aún las prímulas entre neveros menguantes; y de la ventolera del collado de Tacheras al refugio cueva donde almorzamos tan a "gustico"; y de allí a las praderas de altura, el paso por el haya señal que orienta los caminos de tantos esfuerzos; y el paseo por el hayedo que este mayo vive simultáneamente primavera y otoño (verde tierno y marrón), por la helada que quemó los brotes verdes de las hayas tempraneras.
("Brotes verdes", sí).
El haya, y dos caperucitos rojos en descenso.
P.D.: El sábado, Asun y yo ascendimos Ezkaurre, subida por Arguibiela, bajada por Baines al valle de Belabarce. ¡Qué seco está el Ezkaurre!
P.D.2: Las dos fotografías son de Asun.
El domingo 30 de mayo subimos el Achar (descartamos sobre la marcha el Rincón de Alanos, porque se metió la nube y no se distinguía la cima). Ascendimos seis, número que provoca algunas desconfianzas con la repetición, pero que funciona de maravilla para un grupo montañero: Asun, Lourdes, Pilar, Susana, Ángel (no caído) y yo. Entre las nubes bajas, Achar de Alano (2.099) parecía más difícil visto desde abajo. Cuando llegamos al buzón de la cima, las nubes se habían retirado y disfrutamos de ese rato con el paisaje vertical sobre el valle de Zuriza.
Dice Josema que el pico de los Monjes es el que da más por menos. Y reconozco que, si se concede una importancia capital al desnivel y la altitud alcanzada, puede resultar así. Pero los Alanos, sobre todo en invierno y en primavera, además de un desnivel muy asequible ofrecen impresiones montañeras de primera.
Tan sólo bajando: el paso del peñasco calizo al valle colgado donde florecen aún las prímulas entre neveros menguantes; y de la ventolera del collado de Tacheras al refugio cueva donde almorzamos tan a "gustico"; y de allí a las praderas de altura, el paso por el haya señal que orienta los caminos de tantos esfuerzos; y el paseo por el hayedo que este mayo vive simultáneamente primavera y otoño (verde tierno y marrón), por la helada que quemó los brotes verdes de las hayas tempraneras.
("Brotes verdes", sí).
El haya, y dos caperucitos rojos en descenso.
P.D.: El sábado, Asun y yo ascendimos Ezkaurre, subida por Arguibiela, bajada por Baines al valle de Belabarce. ¡Qué seco está el Ezkaurre!
P.D.2: Las dos fotografías son de Asun.
jueves, mayo 27, 2010
Atentos a las señales de tráfico
miércoles, mayo 26, 2010
Montañeros descubridores
"Descubriendo" con gesto de Colón no irritable. Fotografía de Pilar.
Sólo queda el canal de descenso para enlazar con la senda del ibón de Acherito y llegar a Guarrinza. Fotografía de Patxi.
Son descubrimientos personales, para la cartografía de la memoria: la primera vez de una ascensión y una panorámica. El primer descenso por...
Inolvidable 23 de mayo en las cimas de Larraille (o La Ralla) y Mallo de Foyas.
P.D.: Lourdes, Pilar, Patxi y eresfea.
Sólo queda el canal de descenso para enlazar con la senda del ibón de Acherito y llegar a Guarrinza. Fotografía de Patxi.
Son descubrimientos personales, para la cartografía de la memoria: la primera vez de una ascensión y una panorámica. El primer descenso por...
Inolvidable 23 de mayo en las cimas de Larraille (o La Ralla) y Mallo de Foyas.
P.D.: Lourdes, Pilar, Patxi y eresfea.
Apuntes con afán científico, para el mejor conocimiento de los reptiles en mayo
lunes, mayo 17, 2010
Protocrónica de una conversación universitaria de autobús
Oído en la Roncalesa.
Servicio de las 11,30 h.
San Sebastián-Pamplona.
Duración del viaje: 1 hora y 5 minutos.
Las dos jóvenes universitarias en periodo de exámenes viajan con una revista Cuore.
Anoto cronológicamente los ítems de su conversación al tiempo que hojean la revista.
Superromántico / Choni / Pegajoso / Bragueta / Macho / Tipazo / Guapa / Bustamante / Mítico / Mango / Stradivarius / Berska / Fuerte (dígase fueeerrrrte). / Carbonero (Sara) / Zara / "¿Y éstos están enamoraus?" / Buena pareja / Historia forzada / Barça / Leire Pajín / Laura Pausini / "A esas edades cinco años son cinco años, aviso" (tautología con hondura) / "Ahora tiene 27 y se ha quedado normalillo" / Embarazada / Adrede / "Es guapísima y encima tiene 41 años" / "A Lady GaGa seguro que le hacían bullying "/ Muy mona / "Se le caen los párpados" / "Mítico flipao de Gran Hermano" / Qué guapa / Piernas perfectas / "Ese color se lleva mogollón" / "¿Y éstos están enamoraus?" / "Yo gafas no me compraría en una tienda de ropa" / "Son cangrejeras, pero se llaman también fanequeras" / "De prácticas... , yo iría en pantalones" / Unos ojazos increíbles / "Tiene unos pies que parecen barcas" / "Es muy mono" / Basic / Muy guapa / "Yo no quiero salir en las peor vestidas" / "Yo este verano no voy a coger nada de color" (decepcionada). "Yo intentaré" / "Lleva la combinación más rara que existe" / "¿Qué eres? "Virgo". "Yo también" / "A mí fijo que no me pillarían esas cosas si fuera famosa" / "Millán, la de Password" / Pequita / "A mí me emparanoia esa foto mogollón" / Serena / "A mí el pelo recogido no me gusta mucho" / "Esto es peluca, ¿no?" / "Me cae mal..., porque me da rabia" / Guapísima / Grasiento / Chuck /
P.D.: Donde escribí Berska, debería poner Bershka. El error es mío, por ignorante. Donde escribí Millán, debería poner Milán, Ana Milán. Ahí el error fue de las universitarias.
Servicio de las 11,30 h.
San Sebastián-Pamplona.
Duración del viaje: 1 hora y 5 minutos.
Las dos jóvenes universitarias en periodo de exámenes viajan con una revista Cuore.
Anoto cronológicamente los ítems de su conversación al tiempo que hojean la revista.
Superromántico / Choni / Pegajoso / Bragueta / Macho / Tipazo / Guapa / Bustamante / Mítico / Mango / Stradivarius / Berska / Fuerte (dígase fueeerrrrte). / Carbonero (Sara) / Zara / "¿Y éstos están enamoraus?" / Buena pareja / Historia forzada / Barça / Leire Pajín / Laura Pausini / "A esas edades cinco años son cinco años, aviso" (tautología con hondura) / "Ahora tiene 27 y se ha quedado normalillo" / Embarazada / Adrede / "Es guapísima y encima tiene 41 años" / "A Lady GaGa seguro que le hacían bullying "/ Muy mona / "Se le caen los párpados" / "Mítico flipao de Gran Hermano" / Qué guapa / Piernas perfectas / "Ese color se lleva mogollón" / "¿Y éstos están enamoraus?" / "Yo gafas no me compraría en una tienda de ropa" / "Son cangrejeras, pero se llaman también fanequeras" / "De prácticas... , yo iría en pantalones" / Unos ojazos increíbles / "Tiene unos pies que parecen barcas" / "Es muy mono" / Basic / Muy guapa / "Yo no quiero salir en las peor vestidas" / "Yo este verano no voy a coger nada de color" (decepcionada). "Yo intentaré" / "Lleva la combinación más rara que existe" / "¿Qué eres? "Virgo". "Yo también" / "A mí fijo que no me pillarían esas cosas si fuera famosa" / "Millán, la de Password" / Pequita / "A mí me emparanoia esa foto mogollón" / Serena / "A mí el pelo recogido no me gusta mucho" / "Esto es peluca, ¿no?" / "Me cae mal..., porque me da rabia" / Guapísima / Grasiento / Chuck /
P.D.: Donde escribí Berska, debería poner Bershka. El error es mío, por ignorante. Donde escribí Millán, debería poner Milán, Ana Milán. Ahí el error fue de las universitarias.
Sendas y senderuelas
Las senderuelas (Marasmius oreades) son las "culpables" más habituales de esas enormes pruebas de compás verde en medio de las praderas naturales: unas veces se dibujan arcos, otras semicírculos, en ocasiones casi cierran el círculo ("corros de bujas", los llaman). La huella se debe a la mayor concentración de nitrógeno que provoca el micelio del hongo. Y de vez en cuando esas huellas están cuajadas de setas. Como viene ocurriendo, desde hace dos semanas, en las laderas al sur de Satrústegui...
P.D.: La fotografía es de Pilar.
P.D.: La fotografía es de Pilar.
viernes, mayo 14, 2010
Príncipes peregrinos
Ayer me divertí mucho con una noticia en televisión.
"Como dos peregrinos más". Escuché la consigna varias veces. Y salían disfrazados de paseo dominical los príncipes peregrinos, a la sazón: Letizia y Felipe.
Hace siglos había gente que pagaba para que andarines profesionales ganaran las indulgencias para el pagador. Y hay que reconocer los méritos principescos: Letizia y Felipe se lo caminaron. Eso sí, en los informativos estaban de acuerdo en que habían caminado 10 km, y hoy leo que fueron 12,3. Y sigo leyendo que entraron por la Puerta del Perdón en este Año Santo jacobeo, que abrazaron la chepa del Apóstol (bueno, la ordinariez de la chepa es mía), y...
Me quedo con algunos detalles de mala baba.
La ridiculez de los palitos con vieira (no llegaban ni a la bor de bordón), que repartió Núñez Feijóo, como relata El País. ¿Los sacó de una tienda de souvenirs?
Con el hecho de que el resto de los peregrinos que caminan a pie tengan que hacer un mínimo de 100 km (y los ciclistas, 200).
Que en las televisiones mostraran a Felipe extendiendo la victoria del Atlético de Madrid a todos los españoles (yo le recomendaría al príncipe que amasara hojaldre, se le tiene que dar muy bien). Pero, claro, era un peregrino de empalmada: noche de fútbol en Hamburgo, mañana peregrina en Santiago.
Me intriga, también, la misa a la una y cuarto, y con un retraso de cinco minutos (fuera del horario habitual).
En fin: "como dos peregrinos más".
P.D.: Hoy en ABC: "Justo antes de entrar en la Catedral, ocho o diez jóvenes empezaron a gritar «¡República!» cuando llegaron Don Felipe y Doña Letizia, pero sus gritos quedaron silenciados por los abucheos y pitidos que les dirigió la multitud que quería aplaudir a los Príncipes."
La multitud "quería", oiga, ella "quería"... Espero que lo consiguiera (aplaudir).
Hoy en La Voz de Galicia: "...un grupo de jóvenes que jaleaban España, mañana, será republicana".
"Como dos peregrinos más". Escuché la consigna varias veces. Y salían disfrazados de paseo dominical los príncipes peregrinos, a la sazón: Letizia y Felipe.
Hace siglos había gente que pagaba para que andarines profesionales ganaran las indulgencias para el pagador. Y hay que reconocer los méritos principescos: Letizia y Felipe se lo caminaron. Eso sí, en los informativos estaban de acuerdo en que habían caminado 10 km, y hoy leo que fueron 12,3. Y sigo leyendo que entraron por la Puerta del Perdón en este Año Santo jacobeo, que abrazaron la chepa del Apóstol (bueno, la ordinariez de la chepa es mía), y...
Me quedo con algunos detalles de mala baba.
La ridiculez de los palitos con vieira (no llegaban ni a la bor de bordón), que repartió Núñez Feijóo, como relata El País. ¿Los sacó de una tienda de souvenirs?
Con el hecho de que el resto de los peregrinos que caminan a pie tengan que hacer un mínimo de 100 km (y los ciclistas, 200).
Que en las televisiones mostraran a Felipe extendiendo la victoria del Atlético de Madrid a todos los españoles (yo le recomendaría al príncipe que amasara hojaldre, se le tiene que dar muy bien). Pero, claro, era un peregrino de empalmada: noche de fútbol en Hamburgo, mañana peregrina en Santiago.
Me intriga, también, la misa a la una y cuarto, y con un retraso de cinco minutos (fuera del horario habitual).
En fin: "como dos peregrinos más".
P.D.: Hoy en ABC: "Justo antes de entrar en la Catedral, ocho o diez jóvenes empezaron a gritar «¡República!» cuando llegaron Don Felipe y Doña Letizia, pero sus gritos quedaron silenciados por los abucheos y pitidos que les dirigió la multitud que quería aplaudir a los Príncipes."
La multitud "quería", oiga, ella "quería"... Espero que lo consiguiera (aplaudir).
Hoy en La Voz de Galicia: "...un grupo de jóvenes que jaleaban España, mañana, será republicana".
martes, mayo 11, 2010
Silbidos primaverales
Hay unas frasecillas de Fito y los Fitipaldis que silbo después de una excursión breve y primaveral.
Escogiste a la más guapa y a la menos buena.
Sin saber cómo ha venido, te ha cogido la tormenta.
Después de un invierno malo, una mala primavera,
dime por qué estás buscando una lágrima en la arena.
Para mí, Soldadito marinero es una canción que silbada suena alegre. Una alternativa a la melodía de Río Bravo: My Rifle, My Pony and Me.
P.D.: La fotografía está tomada en Astigarraga, después de silbar; de regreso, un minuto antes de empezar a tomar el café.
Escogiste a la más guapa y a la menos buena.
Sin saber cómo ha venido, te ha cogido la tormenta.
Después de un invierno malo, una mala primavera,
dime por qué estás buscando una lágrima en la arena.
Para mí, Soldadito marinero es una canción que silbada suena alegre. Una alternativa a la melodía de Río Bravo: My Rifle, My Pony and Me.
P.D.: La fotografía está tomada en Astigarraga, después de silbar; de regreso, un minuto antes de empezar a tomar el café.
domingo, mayo 09, 2010
jueves, mayo 06, 2010
Los tres mosqueteros (vascos)
J.M.A. está internado en el Hospital Donostia, y para allí van de visita el miércoles 5 de mayo los tres mosqueteros, tres solterones que pasaron la barrera de los setenta años. Ellos son como Athos, Porthos y Aramis, pero en versión Goierri. Para la ocasión, visten la camisa de domingo, el clásico jersey fino de lana de cuello pico, pantalón gris, zapatos y boina. (Paraguas y gabán ya en la mano). Avanzan por los pasillos del hospital algo confundidos, les cuesta subir al ascensor y se dirigen con cierto despiste hacia la habitación 2..., descontando uno por uno los números de las puertas antes de tocar en la de su amigo.
J.M.A. es el D'Artagnan del grupo, porque es de sobra conocido que D'Artagnan era un poco más joven, y que tarde o temprano acabaría casándose. J.M.A. espera con su señora, sabe que hoy vienen de visita los amigos y estrena la bata que le ha comprado su mujer (por supuestísimo), azul marino, oso dotore.
Los muchachos entran renqueando en la habitación, discretos, hasta vergonzosos. Son como niños grandes, muy grandes. Y cuando arrancan a hablar no largan viejas batallas de capa y espada. Sale en la conversación la ziza de primavera y la crecida de los arroyos después de cinco días de lluvia. Ellos, los mosqueteros, han llegado con un presente para su D'Artagnan: una bolsa de fruta.
Porque, claro, ellos hubieran llevado una botella de buen vino (la bebida isotónica de su quinta) y alguna vianda, como chorizo o queso, para picar. ¿Pero qué se lleva a un enfermo en un hospital?
Y verlos a los cuatro insufla una alegría renovada en la épica aventurera, en que los viejos espadachines nunca mueren, en la fidelidad de los amigos de siempre.
Yo pensé: Arturo Pérez-Reverte aquí compone dos novelas.
J.M.A. es el D'Artagnan del grupo, porque es de sobra conocido que D'Artagnan era un poco más joven, y que tarde o temprano acabaría casándose. J.M.A. espera con su señora, sabe que hoy vienen de visita los amigos y estrena la bata que le ha comprado su mujer (por supuestísimo), azul marino, oso dotore.
Los muchachos entran renqueando en la habitación, discretos, hasta vergonzosos. Son como niños grandes, muy grandes. Y cuando arrancan a hablar no largan viejas batallas de capa y espada. Sale en la conversación la ziza de primavera y la crecida de los arroyos después de cinco días de lluvia. Ellos, los mosqueteros, han llegado con un presente para su D'Artagnan: una bolsa de fruta.
Porque, claro, ellos hubieran llevado una botella de buen vino (la bebida isotónica de su quinta) y alguna vianda, como chorizo o queso, para picar. ¿Pero qué se lleva a un enfermo en un hospital?
Y verlos a los cuatro insufla una alegría renovada en la épica aventurera, en que los viejos espadachines nunca mueren, en la fidelidad de los amigos de siempre.
Yo pensé: Arturo Pérez-Reverte aquí compone dos novelas.
lunes, mayo 03, 2010
Muerte de una curruca, causa de arcén (Camino de Santiago 2010)
Es la agonía de una curruca capirotada.
Cuento muchos pajarillos muertos en los arcenes de las carreteras del Camino: lavanderas, pinzones, petirrojos, currucas, zorzales... El 10 de abril, el atropello sucedió delante de mis narices, en la N-634.
No hay grandes discursos de arcén entre los ecologistas, aunque sea una causa kilométrica y cercana. A pesar de causas como la del lince (El lince Ramón de Kiko Veneno:
"Un día de mayo con su Seat Rayo/
va a ver a su novia el conductor Don Ramón/
Pa Matalascañas iba dando caña/
y en ese momento se cruza el lince Ramón"), en nuestras carreteras mueren más bichos pequeños que grandes y, sobre todo, los arcenes carecen de la anchura y el exotismo de lo lejano. No se pueden comparar estos avatares de asfalto y grava con los sucedidos en los territorios desparramados de la selva amazónica o del Congo, o con lo que pasa entre crujidos de hielos árticos... Además, qué es una curruca capirotada muriendo en tierra de nadie ante la agonía del jaguar, de los gorilas de las montañas o del narval.
Pero hay una pena pequeña ahí.
Cuento muchos pajarillos muertos en los arcenes de las carreteras del Camino: lavanderas, pinzones, petirrojos, currucas, zorzales... El 10 de abril, el atropello sucedió delante de mis narices, en la N-634.
No hay grandes discursos de arcén entre los ecologistas, aunque sea una causa kilométrica y cercana. A pesar de causas como la del lince (El lince Ramón de Kiko Veneno:
"Un día de mayo con su Seat Rayo/
va a ver a su novia el conductor Don Ramón/
Pa Matalascañas iba dando caña/
y en ese momento se cruza el lince Ramón"), en nuestras carreteras mueren más bichos pequeños que grandes y, sobre todo, los arcenes carecen de la anchura y el exotismo de lo lejano. No se pueden comparar estos avatares de asfalto y grava con los sucedidos en los territorios desparramados de la selva amazónica o del Congo, o con lo que pasa entre crujidos de hielos árticos... Además, qué es una curruca capirotada muriendo en tierra de nadie ante la agonía del jaguar, de los gorilas de las montañas o del narval.
Pero hay una pena pequeña ahí.
Entzia: las estaciones no esperan
Las anémonas con las flores cerradas por el sirimiri.
Robin Hood no estaba ahí. Pero la versión de 1976, con Sean Connery y Audrey Hepburn, se rodó a pocos kilómetros.
Karst musgoso y boscoso (sin oso).
Me ha pasado muchos años. La gente insiste en invierno, en primavera, en verano... "Tenemos que ir a Irati, tenemos que ir a Irati...". Cada cual sabrá a qué distancia está de Irati, pero cuando llega el momento del otoño boreal en Irati surgen los impedimentos. "¿Y no puede ser la semana que viene?". Y en cuanto las hojas del otoño dejaron atrás esos dos o tres días perfectos, vuelven los comentarios: "Tenemos que ir a Irati, tenemos que ir a Irati...".
Como escribo Irati, podría apuntar los nombres de otros bosques; y como el otoño, la primavera. Ahora corren los días de la primavera a un ritmo vertiginoso. Ha habido un momento mágico para el espárrago silvestre, los nidos de mirlo y malviz tienen el pleno de huevos, no falta casi nada para los perrechicos... El primer verdor de las hayas fue el domingo.
Este verde pimpante lo disfrutamos en Entzia: Asun, Coro, Diana, Karmele, Lourdes, Pilar, Susana, Daniel, Fernando, Imanol C., Imanol E., Jesús, Patxi y yo. Desde San Román, ascendimos a Entzia (la sierra que cierra al sudoeste la continuidad montañera de Satrústegui, Andía y Urbasa) y tocamos varias cimas: Surbe (1.155), Mirutegi (1.166), Ballo (1.198) y Peña Roja (1.067).
Pero ese verde... Las fotografías son de Imanol E., que yo me quedé sin batería en la salida. Ay. Tendré que esperar con mi cámara otra primavera. O reconocer que mi título es falso, que el tiempo tiene sus elasticidades de orientación, temperatura, humedad, altitud..., que aún puedo encontrar el primer verdor del hayedo más al norte, a más altura. Tal vez en Oza. O en Irati.
Robin Hood no estaba ahí. Pero la versión de 1976, con Sean Connery y Audrey Hepburn, se rodó a pocos kilómetros.
Karst musgoso y boscoso (sin oso).
Me ha pasado muchos años. La gente insiste en invierno, en primavera, en verano... "Tenemos que ir a Irati, tenemos que ir a Irati...". Cada cual sabrá a qué distancia está de Irati, pero cuando llega el momento del otoño boreal en Irati surgen los impedimentos. "¿Y no puede ser la semana que viene?". Y en cuanto las hojas del otoño dejaron atrás esos dos o tres días perfectos, vuelven los comentarios: "Tenemos que ir a Irati, tenemos que ir a Irati...".
Como escribo Irati, podría apuntar los nombres de otros bosques; y como el otoño, la primavera. Ahora corren los días de la primavera a un ritmo vertiginoso. Ha habido un momento mágico para el espárrago silvestre, los nidos de mirlo y malviz tienen el pleno de huevos, no falta casi nada para los perrechicos... El primer verdor de las hayas fue el domingo.
Este verde pimpante lo disfrutamos en Entzia: Asun, Coro, Diana, Karmele, Lourdes, Pilar, Susana, Daniel, Fernando, Imanol C., Imanol E., Jesús, Patxi y yo. Desde San Román, ascendimos a Entzia (la sierra que cierra al sudoeste la continuidad montañera de Satrústegui, Andía y Urbasa) y tocamos varias cimas: Surbe (1.155), Mirutegi (1.166), Ballo (1.198) y Peña Roja (1.067).
Pero ese verde... Las fotografías son de Imanol E., que yo me quedé sin batería en la salida. Ay. Tendré que esperar con mi cámara otra primavera. O reconocer que mi título es falso, que el tiempo tiene sus elasticidades de orientación, temperatura, humedad, altitud..., que aún puedo encontrar el primer verdor del hayedo más al norte, a más altura. Tal vez en Oza. O en Irati.