El domingo,
Cristina,
Julen,
Javier y yo ascendimos tres cimas encadenadas en uno de los extremos de las Malloas de Aralar. Escribo ahora con nombres y la altitud (porque me equivoqué allí, y
Julen presta mucha atención a estos detalles): primero Subezelai Gañe (1.209), después Uarrain -foto 2- (1.221) y, por último, Tutturre -foto 1- (1.282).
A pesar de la amenaza de borrasca, no nos mojamos.
En El País Semanal de este domingo venía una entrevista a Delibes. Cómo habla de la mujer de rojo... uf.
ResponderEliminarEstoy superando algunos sentimientos negativos (nótese tono de broma).
ResponderEliminarAlgún día o año de estos lo acompaño.
¿Padre?
Y no hicisteis parrillada? no hay nada que me ponga más que esos chorizos retorciendose en el aceite caliente a 1.200 metros de altura.
ResponderEliminarArkadia, ggggfs, ¡hija! ggggsfs...
ResponderEliminar... Porque Darth Vader también sube montañas.
ResponderEliminarLo que tomo de Eresfea: subir, escalar, dirigirse siempre hacia arriba.
ResponderEliminarLes llovió? Parecían amenazantes esas nubes. Por otro lado, ya te volví a mandar el mail, te llegó?
ResponderEliminarSalú!