sábado, mayo 05, 2007
Adiós, Pipo
Nadie como Pipo. Cuando tenía 10 años y comía un donuts, un niño le dijo: "Gonzalo, dame un poco". Y Gonzalo, que fue siempre un pequeño egoísta con gracia, le sonrió y le dijo: "No". El niño le replicó: "Si no me das un trozo, te llamaré pipo."
Desde 1978, Gonzalo Linares fue Pipo para un buen número de amigos. Algunos se preguntaron alguna vez por la relación entre un botijo, un pipo, con Gonzalo. Poca, la verdad. Gonzalo fue flaco, más bien pequeño, no muy recio. Nadie se explicó qué hacía jugando a balonmano. De hecho era feliz cuando llegaba el otoño y podía vestirse una cazadora que le diera más envergadura. Así podía acercarse a las chicas más hueco. Una vez me confesó: "En verano, con camiseta, pierdo muchas oportunidades". Pipo vivió de oportunidad en oportunidad (quienes le conocieron pueden poner nombres propios a las oportunidades). Y nos divirtió a todos alguna vez.
Pipo fue el constante Don Juan donostiarra, con la antítesis que implica ser Don Juan y donostiarra a la vez. Esa antítesis pudo resolverse in extremis gracias a la campaña del Centro de Atracción y Turismo ("un fin de semana a la donostiarra"), que atrajo turistas españoles los fines de semana a la ciudad; y gracias, también, a la Unión Europea, que desplegó el dichoso intercambio Erasmus y renovaba anual o semestralmente el surtido de extranjeras en el campus universitario. Daba gusto verlo en octubre, como un pequeño tiburón, merodeando por la Facultad, fumando ansioso. Pipo estudió Derecho y se licenció.
Pipo murió hace poco más de una semana, con 38 años. Por lo visto, se quedó dormido sobre la cama con un cigarro encendido. Dicen que murió asfixiado. Luego, su cuerpo se quemó. Al hospital fue su mamá, que sintió un olor a humo y con 77 años descubrió el cadáver de su hijo.
(Algunas escenas no deberían existir).
Pipo nos hizo reír a todos alguna vez, pero el pasado 26 de abril nos dejó compungidos.
Y creo que, excepto por el final, Gonzalo se hubiera reído mucho con este Pipo que he escrito.
Por esa risa contagiosa de la que no nos despedimos, D.E.P.
Aguante Pipo.
ResponderEliminarQEPD
Si a mí alguien me pide ún trozo de dona (soy uruguayo) le digo: Sí, cómo no, tomá el centro.
Tu tun psh!
Cierto, cierto...
ResponderEliminarNo sabía el porqué de su mote, ya me lo explicarás con detenimiento a tu vuelta.
saludo
Qué triste!, de verdad murió?
ResponderEliminarMurió.
ResponderEliminarBuena historia. Pipo. Se puede leer de abajo arriba también. Y resulta muy curioso.
ResponderEliminarTe lo dije, J., últimamente pienso que somos gemelos... Esto empieza a darme un poco de miedo.
ResponderEliminarHay, mira que palabro -quería escribirlo-,concomitancias. Pero siempre serás más alto que yo.
ResponderEliminarPara"pipo"
ResponderEliminarlejos de ti soy una sombra
lejos de ti yo muero.amor.....!y te extraño tanto!
Anna
Para "Gonzalo"
ResponderEliminarPor que,por que ,por que,amor mio ,por que?
pd:se quemo el telefono
Todo final es un luminoso principio
ResponderEliminarDura melancolia
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