Sabiduría reunida por la experiencia y después de escuchar la voz de los expertos (y de no hacer ni caso).
Negaciones
1. No preguntes nunca "¿Cuánto falta para llegar?" o, peor aún, "¿Falta mucho?".
2. No mees en contra del viento.
3. No creas que el culo se limpia bien con una piedra, u hojas, o un poco de musgo. Eso sólo funcionaba en el
Manual de los pequeños castores.
4. No tires basura en el monte, ojo con las cáscaras de las frutas. Son más biodesagradables que biodegradables. Acotación: las cabras comen cáscaras de plátanos y otras peladuras.
5. No rompas las setas que crees que son venenosas (quizá crees que lo son todas menos los champiñones). Porque no haces ningún bien a la naturaleza, y porque EGR quizá las recoge como comestibles.
6. No patees los montoncitos de piedras, hay gente que los ha colocado, por algo será..., quizá, mira por dónde, para guiar por la senda correcta al montañero.
7. Las personas o animales móviles no son buenas referencias para memorizar el camino de vuelta. Si ese hombre que segaba el prado o esa vaca que pastaba se mueve, pueden cambiar tus referencias. Funcionan mejor los hitos fijos: un árbol, una cabaña, un montón de piedras...
8. No se recomiendan boñigas o bostas como elementos arrojadizos.
9. Manantial es cuando el agua brota de la tierra o la roca, no bebas agua de ríos y arroyos, ni siquiera de los arroyos cristalinos (y tal y tal) de la alta montaña, puede que unos metros más arriba haya un animal muerto en ese cauce cristalino.
10. Los carteles de los caminos no se giran ni se tumban, las pareces de los refugios no son para hacer pintadas, y sus chimeneas no se dejan cegadas con cisco y basura a medio quemar.
11. No hace falta llevar ropa de la última temporada a la montaña. Cada año colocan un color, tu ropa (excepto los modelos ochenteros con imitaciones de leopardo sintético y otras variantes) se pondrá de moda dentro de un par de años, paciencia.
12. No dejes las mochilas en el suelo cerca de las camas de los refugios (lo peor: en el suelo debajo de la litera). Déjalas en las taquillas o colgando en las literas, así evitarás entorpecer el paso de otros compañeros y, sobre todo, el traslado de chinches (que los hay en demasiados refugios) a casa o a otros refugios.
13. No maltrates los buzones de las cimas. Forman parte de la memoria de muchos montañeros.
14. No te arrimes a la parte trasera de los caballos.
15. No creas que existen récords de ascensión. La misma montaña nunca es dos veces igual, ningún récord es, por tanto homologable. Dicho de otra manera, es de tontainas correr para presumir del tiempo invertido en subir a una montaña. Cada ascensión es, en sí misma, un récord.
16. La montaña no empieza a partir de los 3.000 metros de altitud.
Condicionales
1. Si encuentras a alguien que necesita ayuda, deja tu montaña y ayúdale.
2. Si vas acompañado, expresa con claridad tus problemas al compañero. Ejemplo: me duele un tobillo, estoy deshidratado, me han picado cuatro tábanos en el hombro. No imagines que el compañero te lee el pensamiento.
3. Si no conoces el camino, no llevas mapa ni brújula y tampoco sabes orientarte: no salgas solo a la montaña, no te salgas del camino, no te retrases o te adelantes del grupo o de quien conoce el camino.
4. Si eres de los que habitualmente pasan sed, piensa que es probable que también la pases en la montaña: lleva cantimplora con agua. Ojo, no sirve con llevar cantimplora vacía o confiar en que alguien la lleve llena.
5. Si quieres ver animales más allá de lombrices, saltamontes o buitres planeando en la lejanía, no grites para hablar en la montaña.
6. Si vistes de negro al sol, te cocerás.
7. Si quieres crecer en la montaña, puede ser útil aprender los nombres de las montañas, de la flora, de la fauna...
8. Si crees que estás agotado y que no puedes dar un paso más, probablemente puedes caminar unas tres horas más.
9. Si quieres que tu fotografía en la cima de la montaña parezca de una montaña más alta, ponte el anorak, las gafas de sol y un gorro; y trata de que no se vea hierba en la imagen. No te hagas esa fotografía con niños o ancianos vestidos de calle.
10. Si alguien te pregunta alguna vez cuánto falta para llegar o si falta mucho responde: "Menos de la mitad".
Afirmaciones
1. Viste ropa interior cómoda.
2. Memoriza los caminos.
3. Cuidado con las alambradas. No se sabe para qué las ponen con púas, tampoco por qué no retiran las viejas cuando ponen las nuevas, quedan oxidadas como lazos punzantes. No conozco a un solo montañero que no se haya herido alguna vez.
4. Lo mejor para no pasar frío es no quedarse quieto, abrigarse y comer.
5. Lleva guantes aunque no haga frío cuando bajes por la nieve dura o el hielo, así no te abrirás la piel de las manos en caso de resbalón.
6. Los murciélagos no beben sangre. Los mosquitos sí succionan sangre y son más abundantes al anochecer. Las polillas (por gordas y ruidosas que sean) no atacan.
7. Un buen mapa puede que no marque algo que existe (un camino, un refugio, una fuente...); un mal mapa es aquel que marca algo que no existe (un camino, un refugio, una fuente...).
8. Lleva siempre una navaja. Algunos juzgan a las personas por el tipo de zapatos, o por el coche... Si algún montañero te juzgara sólo por lo que llevas (que jamás lo hará) miraría: botas, mochila y navaja.
9. Las ortigas pican aunque aguantes la respiración.
10. Ponte los crampones cuando hay nieve dura o hielo.
11. La mejor comida para la montaña es la que más te gusta (y la que más gusta a tus compañeros), otro asunto es cómo la llevas o lo que pesa. (Desoye los cambiantes cantos de sirena de barritas, geles, bebidas isotónicas...).
12. Lleva cámara fotográfica; disfrutarás después.
13. Hay al menos tres motivos para federarse: los descuentos en los refugios de pago; ayudar a la presencia social, al "lobby" de los montañeros; "disfrutar" de un seguro de accidentes.
14. Pon al mal tiempo buena cara.
15. Hay gente que corre por la montaña, también hay gente que camina por la autopista. De todo hay en la montaña del Señor.