En los Pirineos me trabajan algo más que las piernas. Y me acuerdo de algunos ausentes en jornadas perfectas. Por ejemplo: junto a la imagen de la Virgen de Lourdes, en la cima de la Facha (3.005) el lunes pasado, tendrían que haber estado
Lucía y
Simón; también sé que la imagen del descenso de Cristales (2.889), el domingo, con luz de tarde y cerco de montañas, sería perfecta para
Mariana (sin mosquitos), para
María y para el pequeño
Julián.
4 comentarios:
¡Qué envidia! Pregunta: Cuando estás arriba o frente a un magnífico paisaje ¿no te dan ganas de gritar o de hacer un flip-flop o algo así? ¿o la procesión va por dentro?
Vasco: la procesión va por dentro.
Perdón, tenés razón; lo olvidé por un momento.
La luz y los colores de las fotos me encantan. El cielo parece de photoshop.
Abrazo.
P.D.: Gracias por compartir estas vistas.
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