Junto a la represa de Respumoso.
Sobre los ibones helados. Al fondo la Cresta del Diablo.
La muchachada triunfante en la cima de Musales.
Descenso de la cima al collado de Musales.
El domingo 28 de junio subimos Musales. Fuimos una tropa (diez) así que me ahorro las negritas. Escribiré, parafraseando de refilón a Churchill, que estábamos los que éramos y éramos los que estábamos. Musales ofrece hermosos paisajes sin dificultades excesivas. Ascendimos desde la represa de la Sarra (1.438), por el hermoso camino que remonta el río Aguas Limpias, balizado con las pinturas blancas y rojas de la GR11. Cerca de la ermita de la presa de Respumoso (2.121), cruzamos por el dique y ascendimos por la ladera de Musales hasta el collado homónimo. Desde allí, el último empujón hasta la cima. Descendimos por la vertiente sudoeste, paramos en Ibonciecho para remojarnos los pies y tomamos todos los atajos por el barranco de Sanchacollons, hasta el dique de la Sarra.
2 comentarios:
Envidioso estoy!
IK, en el entorno de Respumoso sí apetece decir alpinismo en vez de montañismo.
Publicar un comentario