sábado, agosto 12, 2006

El túnel


En los viajes, un juego consiste en aguantar la respiración dentro de los túneles, a ver si se aguanta hasta salir al mundo exterior. Otro, cerrar los ojos a la espera de abrirlos fuera, con la luz natural... (También flota por ahí el tópico de los que regresaron del peaje de la muerte. Hablan de una luz blanca al final, y de una sensación de paz).
Si la carrera literaria fuera una especie de túnel, pocos como Ernesto Sábato.
El escritor argentino, ya con 95 años y muchas fatigas a la espalda, publicó en 1948 su primera novela con un título nada casual para estas líneas: El túnel.
Un buen número de adeptos leían en su pesimismo y sus destrozos de sabor existencialista una lucha contra el orden establecido.
Desde hace años, no sé si ya completamente ciego, Sábato ve el final. Supongo que habrá respirado con fuerza más de una vez pensando que ya se acababa esta vida, supongo que algún día habrá abierto los ojos en busca de otra luz... Pienso en Sábato como en un escritor abandonado al final del túnel. Muchos de sus antiguos lectores dicen que el viejo Sábato traicionó al joven. Y quienes le despreciaban y desprecian aún con tesón por sus ideas de entonces no lo leen ahora. ¡Ay...!
No estaría de más una lectura de Sábato a dos bandas, por un lado El túnel (1948) o Sobre héroes y tumbas (1961); por otro, La resistencia (2000).
Internet, con sus tijeretazos, me deja copiar este fragmento de La resistencia:
"Hay días en que me levanto con una esperanza demencial, momentos en los que siento que las posibilidades de una vida más humana están al alcance de nuestras manos. Éste es uno de esos días.
Y, entonces, me he puesto a escribir casi a tientas en la madrugada, con urgencia, como quien saliera a la calle a pedir ayuda ante la amenaza de un incendio, o como un barco que, a punto de desaparecer, hiciera una última y ferviente seña a un puerto que sabe cercano pero ensordecido por el ruido de la ciudad y por la cantidad de letreros que le enturbian la mirada.
Les pido que nos detengamos a pensar en la grandeza a la que todavía podemos aspirar si nos atrevemos a valorar la vida de otra manera. Os pido ese coraje que nos sitúa en la verdadera dimensión del hombre. Todos, una y otra vez, nos doblegamos. Pero hay algo que no falla y es la convicción de que —únicamente— los valores del espíritu nos pueden salvar de ese terremoto que amenaza la condición humana."

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Me da mucha pena lo de Sábato, un hombre que desearía haber muerto hace tiempo.

eresfea dijo...

No sé..., no sé si tiene ese deseo.

Ander Izagirre dijo...

¡Andalamar! La semana pasada encontré "El túnel" en una tienda de libros y discos de quinta mano que hay en Gros (calle Colón, échale un vistazo si no la conoces, es también un pequeño túnel). Me lo llevé por 3 euros. ¡Insensato! ¡Insensato!

En Arlabán van a abrir un túnel de cuatro kilómetros. Ahí te quiero ver conteniendo la respiración.

Y el túnel más ancho de España está en Donosti. A ver si adivinas cuál es.

Ander Izagirre dijo...

Perdón: creo que ese túnel aún no ha dejado de ser "de España" pero sí creo que ha dejado de ser "el más ancho".

eresfea dijo...

Creo que el túnel en cuestión está bajo el cementerio, Polloe. El de la foto es de la autovía de Leizarán.

IMANOL dijo...

ahh... si no hablaís de mujeres... menos mal que no he comentado...

Anónimo dijo...

No s{e lo que dir{ia S{abato, pero cada vez que me siento con ganas de hundirme 10 metros bajo tierra, no hago m{as que visitar tu blog para que una sonrisa aparezca.Blog de auto ayuda, mmnn no, pero te podes sentirte orgulloso. Es las 1 de la madrugada del domingo, no me puedo dormir, no puedo aguantar dos p{agians del libro, no quiero comer ni tampoco hablar,pero s{i visitarte. Es raro, no me acuerdo de ti hasta estos momentos, eres la dosis necesaria, espero que alg{un d{ia llegue a ser la suficiente.

Nunca encontr{e la tecla de las tildes-

Anónimo dijo...

Hasta esta la pr{oxima eresfea.

Ander Izagirre dijo...

Sactamente, era del Polloe. Cortísimo pero muy ancho. Pasé ayer mismo, sábato por la noche: tres carriles, arcenes y un poco de acera. Ahora creo que han hecho uno a lo bestia en Málaga.

Anónimo dijo...

No sé si te has dado cuenta de que escribes en sábado sobre Sábato. Es como escribir en lunes sobre los lunnies o en jueves sobre Jeeves...

Anónimo dijo...

Peter, muy ingenioso...y el miércoles sobre la mier..?
Jaja.

Anónimo dijo...

sábato, mientras no se muera que siga escribiendo, que luego ya lo tendrá más difícil... sobre túneles que marquen a tanta gente