Olas, muchas olas en San Sebastián, y cientos de mirones equipados con ropa de alta montaña y cámaras digitales exclamando "hala" u "oh" (en vez de ola). La imagen no es de hoy ni de ayer, pero pronto se incorporarán a google muchas imágenes de este día de la Inmaculada.
Imaginad que, detrás de la barandilla, para llegar al nivel del mar hay, además, unos veinte metros.
Hala, oh, ola.
9 comentarios:
Hala, oh, ola. Oh la la!
Sin palabras. No da ni para empezar a decir ooo (de ola).
no comments.
excelentes fotografías!!!!.
Menudas olas tenéis por ahí. Hoy las he sufrido en cuerpo, alma y cámara de fotos...Aisss, el agua no les sienta bien a las cosas tecnológicas.
La tercer foto, con un poco de imaginación, es la mano de Neptuno (si es que tenía manos) a punto de comerse dos bocadillos.
No me digas que también esta foto es de tu propiedad. Embaucador.
Que sí, que sí... que sí que estás peleador, Anonetoy.
Éstas no son mías, pero creo que se sobreentendía en el mensaje. Pescadas de google.
Por cierto, haced clic sobre Hipolipo, veréis una fotografía de ayer mismo.
La tercera fotografía parece una mano gigante que se comerá a los curiosos.
¡Qué belleza! La primera y segunda foto son espectaculares.
Cada tanto, en el invierno puntaesteño se llena de espuma la rambla, ¡la espuma llega hasta la rodilla! Abrazo.
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