lunes, febrero 13, 2012

Realengo nevado

Fue el sábado 4 de febrero, en una caminata solitaria que me llevó de Baráibar a la cima de Tutturre, y de vuelta a Baráibar.

 Fue el 4 de febrero de 2012, a pesar de la sensación de salto en el tiempo y audacia al volante.

 Vi códigos de barras boscosos (hayedo). 

Y el arriba y el abajo se confundían.
Más allá del bosque, el frío (-10ºC) paralizó la cámara.

2 comentarios:

Sergio dijo...

Los japoneses venden unas sofisticadísimas protecciones para evitar que se congelen las baterías, pero yo me las paso por el sobaco.

eresfea dijo...

¿Y las sales sobaquiles no serán perjudiciales (corrosivas) para la batería?