Sube y baja de Javier y Eresfea por Aralar el día de Santiago. El vocabulario tarzanesco surge entre nosotros: rampa-rampa es subir (Foto 1), Gambo-Gambo es cima (Foto 2), campa-campa es prado, pastura (Foto 3)… Y así.
cuando vaya a españa te voy a buscar...a ver si me haces de guía y rampa-rampiamos alguna juntos...mientras, me voy a conformar con un paisaje suavemente ondulado
En el buzón (hay casitas, cohetes, hongos, pozos, camas, carpas, hachas, dólmenes, cruces, barriles, tambores, casillos, cama...), antes se dejaba la prueba de la ascensión a salvo de las inclemencias del tiempo. El siguiente montañero la recogía y la enviaba por correo a la dirección que se dejaba en la prueba-tarjeta. Antaño, en el País Vasco, eran comunes las tarjetas con imágenes del Sagrado Corazón o de la Virgen; progresivamente, las tarjetas de los clubes de montaña ocuparon su lugar. Ahora, con las cámaras digitales, se extingue esa costumbre. Pero permanecen los buzones y el esfuerzo de los montañeros en las cimas.
Para mantener algo de folklore, lo que se podría hacer ahora es dejar en el buzón una foto instantánea y una dirección de correo electrónico, para que el siguiente montañero la escanée, y mande la prueba a su antecesor. (Además, se podrían bajar imágenes del Sagrado Corazón o de la Virgen. No creo que haya problema, aunque el adjunto del mail quedaría un poco pesado).
9 comentarios:
Tarzán de los montes y el Hombre de las Mil y Una Cenas. Esto sí que es intertextualidad.
Hermosos paisajes. Pica envida, pero la alejo cual Hulk espanta a un mosquito molesto.
Abrazo.
cuando vaya a españa te voy a buscar...a ver si me haces de guía y rampa-rampiamos alguna juntos...mientras, me voy a conformar con un paisaje suavemente ondulado
¡Gracias a Dios! ¡Apareció el buzón! Tenía miedo de que esa simpática costumbre ya no existiese.
¿Para qué sirve la casita?
En el buzón (hay casitas, cohetes, hongos, pozos, camas, carpas, hachas, dólmenes, cruces, barriles, tambores, casillos, cama...), antes se dejaba la prueba de la ascensión a salvo de las inclemencias del tiempo. El siguiente montañero la recogía y la enviaba por correo a la dirección que se dejaba en la prueba-tarjeta.
Antaño, en el País Vasco, eran comunes las tarjetas con imágenes del Sagrado Corazón o de la Virgen; progresivamente, las tarjetas de los clubes de montaña ocuparon su lugar. Ahora, con las cámaras digitales, se extingue esa costumbre. Pero permanecen los buzones y el esfuerzo de los montañeros en las cimas.
Para mantener algo de folklore, lo que se podría hacer ahora es dejar en el buzón una foto instantánea y una dirección de correo electrónico, para que el siguiente montañero la escanée, y mande la prueba a su antecesor. (Además, se podrían bajar imágenes del Sagrado Corazón o de la Virgen. No creo que haya problema, aunque el adjunto del mail quedaría un poco pesado).
Esa propuesta me tienta, al nonino...
eresfea: la cena apalabrada para el viernes será el jueves!!
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