lunes, julio 10, 2006

Al borde


Esto pudo ser el 1 de julio en Aralar. Uno se asoma al borde de una sima, siente el suelo de musgo mullido, algo inestable. Tira una piedra y escucha cómo cae hacia la oscuridad, cómo choca contra las paredes..., hace un cálculo de caída libre para la piedra (y mortal para uno mismo).
A veces este tipo de bobadas nos llenan de audacia y nos hacen sentir que vivimos "peligrosamente", y recordamos el tópico: "Más vale llenar los años de vida que la vida de años". (Socorrido recurso en caso de accidente montañero).
Hoy me he enterado de la muerte de la mamá de Marcela. Un balazo en Montevideo.
Y pienso que la aventura es vivir como buenas personas. ¿Podría hacerlo yo si a mi madre la mataran de un tiro en la calle? Tengo que confiar en Marcela, y en el amor que en ella sembró su mamá.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias Eresfea por decir algo. El dolor y palabras que no dicen nada es más dolor, certero, venoso y confuso aquello. Y al final amor. Una mirada llena de verguenza para ella, que miro la vida por TV. Perdón.

Anónimo dijo...

La mamá de Marcela se llamaba Brenda y era una mujer buena, buena, muy buena. Esa mañana, la de su muerte, había ido, como todos los días, a Misa. Brenda trabajaba en la parroquia de Don Orione con alegría y entusiasmo (sólo así se puede hacer este trabajo, ¿cómo, si no?). Se dedicaba de lleno a preparar la liturgia de la Misa, para que los que asistían a ella sintieran más cerca a Dios. Y, en un instante, fue ella quien Lo sintió: como quien te toca en un hombro y te das vuelta y te encuentras en los brazos de tu padre. Así se marchó Brenda, que estaba preparadísima para entrar en el cielo. ¿Y yo?

eresfea dijo...

No entiendo el final del primer mensaje, y yo sí debo pedir perdón, porque seguro que tiene el sentido que no encuentro. Explícamelo, por favor.

Sí entiendo el segundo mensaje, y ese discreto uso del pronombre al final, que me invita a ser algo más que el guardián de mi hermano.

Anónimo dijo...

Hola Eresfea, es la primera vez que leo las reflexiones de tu blog, y la verdad que me parece muy interesante. En que lado no te metiste?
Respecto a este articulo, me parece que no somos conscientes de la muerte en el fondo, y vivimos la vida como si fueramos a vivir para siempre.

Un beso grande y esperamos verte pronto (ya te voy a tener q aguantar este semestre en 2 materias, jeje!)

Ximena